Un año más... Un año menos

Se acerca el final. Apenas quedan horas para despedir este año que se acaba y empezar uno nuevo, lleno de retos y nuevas experiencias y emociones. Es hora de hacer balance, ese balance que llegado el momento nos da nostalgia, melancolía, miedo, pereza. Y después de todo, nos hace terminar agradeciendo, porque al fin y al cabo las cosas siempre pueden ir a peor.

En los momentos más difíciles es dónde se descubren los grandes tesoros: los amigos de verdad, la familia, los pequeños detalles. Porque la vida son dos días, hay que levantarse y seguir caminando, que los malos tiempos, estoy segura, pasarán.

Porque hay personas que vienen y van; personas que llevan con nosotros desde siempre, personas que acaban de llegar o personas que sin saber por qué, ya no están; y personas que inexplicablemente y a pesar de todo, siguen estando ahí, a nuestro lado, en nuestra memoria, en nuestros pensamientos o en nuestro corazón.

A todos los que estáis ahí, haciéndome la vida más agradable día a día. A todos los que me habéis acompañado durante este año, apoyado, animado, consolado, escuchado, a los que me habéis hecho reír, a los que me habéis enfadado en algún momento, a los que me habéis enseñado, inspirado, aconsejado... A todos vosotros, y por qué no, también a los demás, os deseo un muy Feliz Año Nuevo. Mi 2012 ha estado repleto de buenos momento, éxitos profesionales y personales, y aunque también he tenido cosas malas sin duda me quedo con las buenas, que pesan mucho más.

2012 no ha sido fácil para muchos. Por eso os animo a empezar el año con una gran dosis de optimismo y una gran sonrisa en la cara. Seguirá bastando con una sonrisa, con una caricia, con un gesto amable, con una mirada... para emocionarme. No perdáis vuestra esencia.

Que en 2013 se cumplan todos vuestros sueños!!!!