Magic London

No sé qué tiene esta ciudad que me atrapa por completo. A pesar de su clima, las prisas, el estrés y lo frenético que puede resultar a veces, Londres tiene una magia cautivadora.

Por suerte, mi trabajo me permite visitar la ciudad cada tres o cuatro meses; sin embargo no siempre tengo todo el tiempo que me gustaría para poder hacer cosas: visitar museos, ir de compras, salir a cenar y a escuchar buena música, o simplemente pasear por sus calles o alguno de sus bonitos parques. Por eso esta última vez he aprovechado y me he tomado dos días libres para disfrutar de este paraíso urbano. Y cuánta suerte he tenido! La Navidad ya ha llegado a la ciudad, y estaba todo precioso! He disfrutado como una niña viendo escaparates, luces encendidas y escuchando villancicos.

Aquí os dejo algunas de las fotos que tomé. En esta ocasión el recorrido fue:

- Candem y algunos de sus rincones mágicos. Sus extravagantes tiendas y escaparates, el aire vintage de sus mercadillos y la mezcla de culturas y tribus urbanas hacen que no me canse de visitar este sitio, aunque sea uno de los más turísticos. Es una pena que la cámara no ilustre los olores. Londres siempre huele a comida, y Candem mucho más! Más vale no ir allí con hambre...

 

 

- London Eye, desde donde se disfruta de unas bonitas vistas a la Abadía de Westminster  y al Parlamento. A pesar del frío una vez caída la noche, di un agradable paseo por la ribera del río para toparme con un bonito mercadillo navideño de lo más entrañable.

 

- Día de shopping por Regent Street, donde se dan cabida las tiendas más exclusivas de la capital londinense.

 

- Carnaby Street, donde se encuentra una de mis tiendas favoritas, Dhalia, que, para mi sorpresa, vende también online! En esta zona se respira también un ambiente especial... es todo taaan bonito!

 

 

 

- Después de un día agotador recorriendo la ciudad a pie, me dirigí a Covent Garden para encontrarme con este inmenso árbol de navidad, y la preciosa decoración navideña que alegraba aún más si cabe este mercadillo. Allí me tomé un café calentito mientras escuchaba en directo a una soprano promocionando su disco, allí en plena calle. Estas cosas pasan en Londres... Fue precioso y la música acompañaba tanto a la estampa navideña...

 

- Para finalizar el día, y aunque ya no podía más con mis piernas, fuí a Somerset House, donde había oído que había una pista de patinaje sobre hielo preciosa. No me decepcionó en absoluto, lástima que fuera sola y apenas me quedaran ya fuerzas, me hubiera encantado patinar!

 

Como colofón cené muy rico en un restaurante en Shoreditch, donde se encuentra también mi hotel favorito de la City, gracias a la recomendación de un nuevo amigo.

Y por desgracia, al dia siguiente tocaba trabajar :( Aunque ya estoy planeando mi próxima visita!!

¿Cuál es vuestro rincón favorito de Londres?